“La USTR no cederá sobre la interpretación de las reglas de origen, debido a que la industria automotriz representa un puntal en el plan de infraestructura de Joe Biden, además que con ello fortalecería su plan económico para impulsar la industria estadounidense que bajo el lema \’Build Back Better, promete crear empleo, y fortalecer la estrategia de cadenas de suministro.
La interpretación en la que no coincide Estados Unidos con México y Canadá se encuentra en el artículo 5.16 del T-MEC y el numeral 8 de la Decisión 1 de la Comisión de Libre Comercio del mismo Tratado, cuyas Reglamentaciones Uniformes surten sus efectos a partir de la entrada en vigor de dicho tratado, el 1 de julio de 2020″.
Analiza José Ignacio Martínez Cortés, coordinador de LACEN-UNAM y profesor del CRI-FCPyS en El Economista.